EL REINO DE LAS SOMBRAS
Cando penso que te fuches,
negra sombra que me asombras…
(Rosalá de Castro)
Si nosotros somos la cara, la sombra es nuestra cruz. No hay cuerpo sin sombra. Pero hay, quizá, sombras sin cuerpo: sombras que son en realidad fantasmas, autónomas, incorpóreas.
La sombra se nos parece, pero no demasiado: a veces se diría que son un resumen de nuestra parte menos presentable, todo aquello de nosotros mismos que no queremos ver, pero existe. A veces, en el calor extremo del verano, la sombra es un refugio, un descanso fresco. Pero otras veces, como le explica Mufasa a Simba, es eso que se extiende (y que se acerca) más allá de los límites, donde acaba la parte soleada y controlada del mundo.
Hay héroes que han bajado en vida al reino de las sombras, al Inframundo: Ulises, Heracles, Orfeo… También Dante lo hizo. De la mano de estos personajes, nuestra imaginación ha viajado al reino dudoso de lo que hay (o no) más allá de la muerte. Es un viaje que forma, quizá, parte de la tarea de todos los héroes -pues, como dijo el poeta romántico Hölderlin, allí donde se esconde el peligro se esconde también la salvación: el tesoro que guarda el dragón, la princesa perdida, el objeto mágico que salvará el reino.
La tarea misma de la ciencia es ahondar en la realidad, explorar las zonas sombrías que ignoramos, para extraer medicinas de los venenos, luz de la oscuridad, orden del caos. Traer a las sombras a la luz, a los muertos a la vida, ha sido el intento de Orfeo, pero también del doctor Victor Frankenstein y otros investigadores valientes. El propio Cristo trajo de vuelta a Lázaro, como un anticipo de la resurrección general que tendra lugar al final de los tiempos.
Las sombras representan también el conocimiento prohibido, perseguido: es el Libro de las Sombras donde las brujas de Embrujadas escriben o leen sus hechizos; y el ángulo oscuro del salón donde el arpa de Bécquer espera la mano de plata que sepa arpegiarla.
Hay, en fin, mucha sombra que cortar. Y para proceder a hacerlo, os invitamos a este concurso de sombras, donde podéis dibujar, contar o poner en verso vuestras imágenes, historias o sensaciones sombrías.
Así que os proponemos tres categorías:
A) Dibujos
B) Textos en prosa
C) Textos en verso
En cada una de ellas,
habrá un premio para los dos trabajos más votados. ¿Y quién podrá votarlos? Todos nosotros. Los trabajos se publicarán en la cuenta de la Biblioteca en Instagram: @biblioiesaugustobriga. Cuando acabe el plazo de presentación de originales, el 30 de noviembre, estos se publicarán en la cuenta y los visitantes tendrán una semana para dejar sus likes en los trabajos que más les gusten. Pasada la semana, los trabajos más valorados recibirán el premio que se merecen, que se entregará antes del 15 de diciembre en la Biblioteca.